Revelar lo invisible a través de la ciencia, el arte y la tecnología significa dar importancia a los fenómenos físicos que rigen nuestra vida cotidiana. La ciencia está en todas partes. Analiza, trata, formula los mecanismos del mundo.
Es una arquitecta de la realidad, construyendo los límites de nuestro mundo. La curiosidad intrínseca del Hombre ha empujado a la ciencia a convertirse en un medio entre lo visible y lo invisible. Telescopios, microscopios... han aparecido para que el Hombre en su dimensión espacial y visual pueda trascenderse a sí mismo.
Si se multiplican las dimensiones, se estremecen las referencias. Esta distancia nos lleva a reconsiderar nuestra realidad, a repensar, pero sobre todo a verla con nuevos ojos. Una experiencia visual que cambia la mirada de los espectadores sobre la realidad y les recuerda que en cada momento, más allá de lo que perciben, el mundo se desborda de micro/macro poesía.